Paro nacional docente el 4 de octubre

El 4 de octubre se cumplen seis meses del asesinato del profesor Carlos Fuentealba. Ctera, el gremio docente a nivel nacional, resolvió convocar para ese día a un paro de 24 horas. Frente a la impunidad y a la continuidad de políticas que ignoran la lucha de Fuentealba, trabajo digno por salario digno, mejores condiciones para la educación, el paro es una medida que se esperaba ya desde hace un tiempo.
Quizás Yaski debió haber reaccionado con más energía en el momento en que esto ocurrió, por eso también hay sectores que cuestionan a la conducción de Ctera. Lamentablemente hay que decir que ahora el paro, si bien es una medida de protesta que contribuye en casos de este tipo, parece algo ejecutado como para que el gobierno se pueda pavonear diciendo lo tolerante que es con este tipo de expresiones. Probablemente va a haber una reunión en casa de gobierno, un comunicado conjunto o algo así. Triste, en cierta forma.
Sin embargo, no se puede dejar de reivindicar a la medida de fuerza como una manera de expresión contra una impunidad creciente y un cierto olvido de un tema que en su momento dió que hablar en los medios.
El gobernador Sobisch ha inundado de publicidad, seguramente pagada por el bolsillo de los neuquinos, sobre su candidatura, que es una manera de tapar aquello de lo que es el máximo responsable político.
En una provincia donde hay un gobernador y se da la orden de tirar y luego, encima esa persona se hace "totalmente responsable" desde los medios, bueno, no hay mucho que agregar. Sin embargo, nada ha sucedido que sea relevante en la causa, los responsables máximos exhiben un algo grado de impunidad y eso, CONTRA LO QUE EL GOBIERNO NO PONE EMPEÑO EN LUCHAR, es continuidad directa de los años noventa, léase menemismo.

El 4 vayamos al paro, pero no seamos zonzos.
Hasta la próxima.
Gustavo

Peleas

En Tucumán, una pelea entre sindicalistas de vialidad, dedó el saldo de una persona gravemente herida de la cual mañana tal vez nos despertemos con que no alcanzó a pasar la noche.

No es la primera vez que este sindicalismo que soportamos en la Argentina nos juega una pasada de estas.

Todavía no quedó suficientemente claro el incidente de la Quinta de San Vicente cuando se trasladaron allí los restos de Juan Domingo Perón.

La brutalidad es algo muy común en determinados ambientes, pero nos quieren convencer de que es lo rústico el problema.

En sentido contrario, Fuentealba fue un militante hecho y derecho que perdió su vida frente a la peor de las patotas, una fuerza de seguridad.

Ojalá mañana no haya que lamentar otra pérdida.

Hasta la próxima.

Gustavo

Un año sin Julio López

La misma impunidad. La que liquidó a Carlos Fuentealba, la que asesinó a Maxi y Darío. Un año sin Julio López. ¿Quién es el responsable? ¿Por qué no se investigó como corresponde a los aparatos represivos?

¿Por qué en lugar de perder el tiempo investigando hipótesis inverosímiles no se investigó en profundidad a los que el testimonió de López hundió en la cárcel?

¿Por qué la misma impunidad anda suelta y se pavonea como candidata a las elecciones?

¿Por qué se perdió el tiempo sosteniendo que Julio estaba simplemente perdido?

¿De quién es el cuerpo que se encontró inmediatamente después de la desaparición de Julio?

Necesitamos respuestas y las necesitamos YA.

Hasta la próxima.